domingo, 12 de febrero de 2012

La inserción de las Hermanas Pasionistas en el Barrio "Mataderos" de Zárate y visita de Mons. Sarlinga

Mons. Oscar Sarlinga se manifestó muy contento y edificado del encuentro con las Hermanas Pasionistas (Hermanas de la Santa Cruz y Pasión de Nuestro Señor Jesucristo) a quienes había visitado en distintas oportunidades pero siempre lo había hecho en el contexto de encuentro con las comunidades de promoción humana integral en las que se hallan insertas. En esta oportunidad compartió una entera tarde con ellas, celebró la Misa del domingo en el oratorio y compartió la cena, con la Hna. Angélica Algorta (responsable general) y la comunidad de hermanas que con su testimonio de fe y servicio ayudan a tantos hermanos nuestros.
Más que una “visita pastoral” –dijo Mons. Sarlinga- fue un encuentro fraterno, me sentí muy enriquecido de escucharlas, de "estar" precisamente en el lugar donde se palpitan tantas necesidades (espirituales y materiales) de los hermanos, conocer mejor la modalidad de "inserción" que hicieron las hermanas, y, sencillamente, haber compartido con confianza, con diálogo sincero (a través del cual también reafirmé la importancia de estar siempre cercano) la tarde de ese domingo”.
La humilde casa de las hermanas en el barrio de Mataderos (muy parecida a las casas del resto del barrio, caracterizado por ser uno de los más humildes de Zárate) es domicilio de parte de las religiosas que actúan en la diócesis. Asistieron al encuentro también hermanas del mismo instituto religioso que se encuentran en el barrio de la capilla “San Cayetano”, ubicada en Campana, en el límite con el partido de Zárate, en gran parte más carenciado (aunque con buen apoyo del centro integrador y de la escuela municipal) y en parte de asentamiento reciente.
Como se dijo, la comunidad de las Hnas. Pasionistas es “de inserción” entre los más pobres y realiza una tarea notable entre los más desheredados, los necesitados y quienes sufren, por distintas razones, exclusión. Cabe destacar que como instituto religioso, ya en 1990 surge la primera edición del Ideario Pedagógico Pasionista, sintetizando los principios que sustentan la misión de las hermanas como educadoras, las cuales, luego de proceso de discernimiento optaron por una presencia más directa en ámbitos de inserción. Así, fueron retirándose de la presencia directa de los colegios, aunque prosiguieron acompañándolos desde la animación y la fidelidad al carisma fundacional.
Con esta modalidad se encuentran prestando su servicio en nuestra diócesis, como hemos dicho en Zárate (Barrio Mataderos) y en el partido de Campana (Barrio San Cayetano). La capilla de San Cayetano, en medio del populoso barrio que lleva su nombre, en el límite con Zárate, es “casa de Dios” y a la vez un centro de promoción humana integral, con atención a los más pobres y necesitados, a cargo del P. Bernardo Hughes, también Pasionista, quien nos ha dado un testimonio  a lo largo de años en su tarea en toda esa zona. Lo ayuda en esa misión un grupo de laicos y laicas comprometidos con el ideal de dedicarse a los hermanos y hermanas en quienes más se realiza “la Pasión” del Señor.
 En cuanto a las hermanas, también llevan adelante, junto con algunos laicos y laicas, la biblioteca popular sita junto a la iglesia parroquial de la Beata Teresa de Calcuta, en Zárate. En el partido de Zárate la casa de las hermanas se encuentra en: Casa 100 (Barrio Matadero), casilla de correo: 166, 2800 ZÁRATE.
Para un mayor conocimiento de la entrega evangélica de las hermanas puede consultarse el sitio:

sábado, 4 de febrero de 2012

Los ejes pastorales de la comunión orgánica y la misionaridad en el contexto de la caridad social o solidaridad

En la diócesis de Zárate-Campana, nuestro Plan ha querido poner de manifiesto cuánto necesitamos, como Iglesia particular, en unión con la Iglesia Universal, el vivir la «comunión» con ese “signo visible del encuentro con Dios” que es la Iglesia de Jesucristo. La comunión se expresa en el Amor divino por nosotros, y en nuestra unión con él, y en especial mediante la participación en los signos de Cristo,viviente y operante en la Iglesia, que son los sacramentos, y esto de tal modo hasta conseguir en su celebración una verdadera plenitud, dando a la evangelización toda su integridad culminante en la Eucaristía, en el culto y en la vida cristiana, en la gran vocación cristiana a la santidad y en las vocaciones específicas. Entre ellas,las vocaciones sacerdotales encontraron su lugar en el corazón de la naciente (1976) diócesis de Zárate-Campana, por solicitud de su primer Obispo, Mons. Alfredo Esposito Castro.
La Inmaculada Concepción congrega a la feligresía y la anima a crecer como Iglesia
La primer misión juvenil del 2012
Las comunidades celebran, el 5 de diciembre, la colectividad portuguesa
Diversas vicisitudes hicieron que dicha experiencia tuviera un paréntesis entre 2001 y 2009. Reabierto el Seminario diocesano por el actual obispo Mons. Oscar Sarlinga, como dijimos, en 2009, las circunstancias de tránsito y urbanización imposibilitaron que se pensara en viajar diariamente (y con horarios distintos). Por eso desde 2009 hasta 2011 funcionó en un ala del edificio “Cardenal Copello”, en Parque Chas. Allí tuvo sede hasta ahora el Seminario de la diócesis de Zárate-campana, el cual, debido a la hasta ahora creciente respuesta vocacional, ya no es posible mantener en esa ala del edificio, y es por ello que desde meses atrás se ha emprendido la restauración del antiguo edificio del Seminario fundado por Mons. Esposito, ya no sólo con la formación sacerdotal, sino también con el área académica, con toda la “ratio studiorum” de la Iglesia, validada simultáneamente  a través de profesorados temáticos filosófico-teológicos. Todo esto, por lo cual tenemos que dar gracias, es obra del Espíritu en todos nosotros, Espíritu de Unidad, que nos hace ver el Rostro de Cristo en la Iglesia y en cada uno de nuestros hermanos. “Comunión” implica cual lógica consecuencia la necesidad de deponer toda división y alejamiento de los unos con los otros. Es por ello que, como Iglesia particular de Zárate-Campana, partimos de la contemplación del Rostro de Jesús. Como nos lo expresara el Beato Papa Juan Pablo II, como legado para el Tercer Milenio: en “Novo Millenio ineunte”: “(…) la santidad es la perspectiva en la que debe situarse todo camino pastoral (…) la santidad de nuestras comunidades… es lo que ha de sostener, recrear y potenciar las actividades propias de la pastoral ordinaria”.
Presencia de la Fundación de la Beata Madre Teresa en Zárate

Seminaristas y sacerdotes en Misión Joven 2011 en Pilar

Un momento fundamental de la piedad popular la peregrinación del Pueblo de Dios de Zárate-Campana a Luján

 En esta contextualización, invitamos a los lectores a revisar el Plan Pastoral (el cual puede consultarse íntegro en la página web del Obispado de Zárate-Campana: www. obispadozaratecampana.org.
En la perspectiva que específicamente dicho Plan asume, es decir, dentro de la «Caridad Pastoral» de la Iglesia, y de cómo nos hacemos eco de todo lo que en nuestra diócesis ha venido realizándose, con sus alzas y sus bajas, pero siempre con el auxilio del Espíritu Santo, en el apartado llamado:
“El camino pastoral recorrido nos orienta y nos allana el camino por recorrer”

Plantación simbólica en el Centro de Nuestra Señora de las Islas, en el Delta campanense
Pastoral de adicciones en la diócesis
La Virgen de Luján es nuestra Patrona y San José compatrono

1. El Plan Pastoral asume el camino recorrido
El Plan Pastoral asume el camino pastoral recorrido desde el trigésimo aniversario de nuestra diócesis, y todo el trabajo apostólico que la ha cimentado con precedencia. La consideración de este capítulo nos hace ver cómo las líneas fundamentales y generales ya estaban presentes, tanto en las orientaciones como en la práctica, aunque no de modo compendiado, en nuestra pastoral orgánica del trienio marzo 2006/marzo 2009. El informe complexivo solicitado a la Vicaría de Pastoral constata que se ha trabajado en las diversas líneas y orientaciones pastorales basadas sobre el concepto de Pastoral Orgánica.
Estos elementos que siguen, y que forman parte de dicho informe, son enteramente asumidos por este Plan Pastoral.

2. Orientaciones programáticas efectivamente realizadas y re-asumidas en este Plan Pastoral
Los siguientes temas se han ido tratando en diversas ocasiones (reuniones de sacerdotes, reuniones de consejos y organismos diocesanos) y que han ido marcando el itinerario pastoral diocesano desde 2006 hasta el presente:
-La Misión como una necesidad permanente y una actitud necesaria para la evangelización de nuestra diócesis.
-El impulso de la Pastoral de Juventud y Pastoral Vocacional
-El apoyo a los Movimientos eclesiales en la diócesis y a su integración en la Pastoral orgánica.
-El impulso a Catequesis, Caritas, Pastoral Social, Educación católica,
-Religiosidad Popular (con las fiestas patronales, la Peregrinación del Pueblo de Dios a Luján, que merece la mayor de las consideraciones por su importancia pastoral, y que data de 30 años, así como otras manifestaciones). Del mismo modo, han tenido relevancia las normas sobre la catequesis impartida en establecimientos escolares (y su distinción de la enseñanza religiosa), las normas sobre el lugar el Sacramento del Matrimonio.
-La creación de necesarias infraestructuras para el desarrollo de la pastoral (construcción de iglesias y capillas, casas parroquiales, salones de uso pastoral, sede diocesana de Cáritas, centros de evangelización y de promoción humana en barrios humildes).
-El uso de las Comunicaciones sociales (entre las cuales, aunque no las únicas, la página-web del Obispado, el «infodiócesis» o newsletter semanal, las páginas-web y publicaciones parroquiales).
-La revitalización de la Escuela de Ministerios y Diaconado Permanente.
-La potenciación de los Seminarios catequísticos.

3. Organismos de comunión recreados o puestos en funcionamiento
Para esto han ayudado grandemente estas realidades:
-Función del Consejo presbiteral. (Estatutos, formación, funcionamiento del mismo y periodicidad de las reuniones, con lectura del acta de la reunión anterior y evaluación de las realizaciones).
-Función del Colegio de Consultores (Formación y funcionamiento del mismo y periodicidad de las reuniones, cuando lo requieren los «asuntos de mayor importancia» de la diócesis).
-Función del Consejo Pastoral Diocesano. (Estatutos, formación del mismo, trabajo mancomunado, organización de encuentros y actividades, subsidio y ayuda a la pastoral orgánica y de conjunto).
-Creación de la misma Vicaría para la Pastoral y de las Delegaciones episcopales para las distintas áreas pastorales.
-Importancia del funcionamiento de los Decanatos (a los que se referirá de modo específico el último capítulo de este Plan, in fine).

4. Pautas que ayudaron en la comunión orgánica y que este Plan Pastoral reafirma
Ha sido muy importante la inserción lograda de la diócesis en una visión de la Iglesia en la Argentina, sobre todo a través de la participación de Delegados diocesanos, Asesores diocesanos y laico comprometidos (y designados para ello) en las reuniones nacionales de las distintas áreas pastorales, lo cual ha coadyuvado a insertarnos como Iglesia particular en una línea pastoral común con las otras diócesis del país (teniendo como referencia el las Líneas Pastorales del Episcopado Argentino, Navega Mar adentro) y con la tónica de las orientaciones y lineamientos de la Conferencia Episcopal en las distintas áreas.
Conforme al sentir del Obispo, la Vicaría de Pastoral ha considerado atender ahora a la profundización de lo realizado, y este Plan lo ha asumido, esto es, el buscar una Iglesia diocesana evangelizada y evangelizadora, para lo cual hay que apuntar a un objetivo general que podríamos formular en los términos de FAVORECER EL CULTIVO DE LA EXPERIENCIA DEl DIOS TRINO EN CRISTO DENTRO DE LA COMUNIÓN ECLESIAL.

5. Para favorecer la consecución de dicho objetivo general se ha dan estas pautas:
a. Fomentar la vida de oración y el trato con Dios a nivel personal, familiar y comunitario en nuestras parroquias y comunidades.
b. Revitalizar nuestras celebraciones litúrgicas y, en especial, la Eucaristía dominical, procurando recuperar el sentido del domingo como Día del Señor. En la acción evangelizadora de la Iglesia, entran a formar parte ciertamente algunos elementos y aspectos que hay que tener presentes. Algunos revisten tal importancia que se tiene la tendencia a identificarlos simplemente con la evangelización. De ahí que se haya podido definir la evangelización en términos de anuncio de Cristo a aquellos que lo ignoran, de predicación, de catequesis, de bautismo y de administración de los otros sacramentos. Porque, ninguna definición parcial y fragmentaria refleja la realidad rica, compleja y dinámica que comporta la evangelización, si no es conel riesgo de empobrecerla e incluso mutilarla. Resulta imposiblecomprenderla si no se trata de abarcar de golpe todos sus elementosesenciales(26).
c. Difundir el conocimiento de la Sagrada Escritura, para penetrar más en el conocimiento de Cristo aprovechando el Sínodo sobre la Palabra de Dios, con una proyección concreta en las parroquias y decanatos a través de los círculos bíblicos, de meditación y estudio de la Palabra de Dios.
d. Profundizar en la formación en todos los fieles y de forma particular en los agentes de pastoral.

6. Sugerencias pastorales concretas para realizar lo que antecede a los fines de implementarlas en TODAS LAS ÁREAS DEL APOSTOLADO (y no sólo en áreas específicas)
a. La Oración comunitaria y el favorecimiento de los retiros espirituales parroquiales, así como el fomento de los ejercicios espirituales.
b. «Talleres de oración» en las parroquias y decanatos.
c. Elaboración y difusión de materiales para la oración en familia y devociones populares (como las novenas de las fiestas patronales, por ejemplo).
d. Potenciación de los equipos de liturgia, los Cursos de liturgia.
e. Cuidado de las celebraciones y la oración en las parroquias y en los grandes acontecimientos de religiosidad popular (fiestas patronales, peregrinaciones)
f. Oración de laudes y vísperas en las parroquias
g. Elaboración de material y modos de trabajar para ahondar en el sentido del domingo.
h. Fomento del culto Eucarístico y la adoración ante el Santísimo Sacramento.
i. Fomento de la oración comunitaria y el trabajo por las vocaciones, en especial a través de la recreación de la «Obra de las vocaciones sacerdotales y religiosas».
j. Acentuación de la formación adecuada para revisar y profundizar la vivencia y experiencia de Dios desde la espiritualidad seglar (familia y trabajo).
k. Mayor conocimiento de los testimonios de santidad en la Iglesia universal y en nuestras tierras.
l. Promoción de cursos sobre el Catecismo de la Iglesia Católica de forma que se profundice en los fundamentos de la fe.

7. Profundización en la dimensión evangelizadora de toda la Pastoral
El Proyecto pastoral debe profundizarse aún más al considerar el aspecto evangelizador, el objetivo de lograr una DIÓCESIS MISIONERA.
También en ese sentido, el «camino recorrido», o la misma realidad eclesial vivida, tiene mucho para proponernos.
Ya se había reflexionado sobre la necesidad de la misión entendida en primer lugar hacia dentro de la misma comunidad diocesana. Ése es el sentido del llamado “estado de misión”.
Dicho estado de misión se prolongará también a la caridad institucionalizada, y para ello se está trabajando en el ámbito de Cáritas y Pastoral Social. Es la consideración profundizada de la dimensión evangelizadora de la caridad. Es éste el sentido del mensaje de nuestro Obispo en la apertura del Año Paulino Jubilar: “Este tiempo de gracia es ocasión propicia también para que reflexionemos en la relación esencial entre justicia y caridad, virtudes inseparables, tema al cual el Papa le ha dedicado una especial consideración en la segunda parte de su Encíclica «Deus Caritas est». No existe caridad sin justicia. Al mismo tiempo, el cristiano está llamado a buscar siempre la justicia, llevando dentro de sí el impulso superador que proviene del Amor, que supone la justicia y la trasciende. Reaprender a ser justos, a compartir, a crear condiciones de justicia y paz, implica abrir el corazón a Dios y a los hermanos. Que sea éste un tiempo en que podamos ver cómo la fe abre puertas extraordinarias al trabajo por un orden justo en la sociedad, a una «caridad social» rectamente entendida y aplicada, y en particular en lo referente a los fieles laicos, en la participación personal en la vida pública, cooperando con los demás ciudadanos” (Carta pastoral del Obispo con motivo del Año Paulino”)
La propuesta y puesta en práctica de las «misiones juveniles» llevadas a cabo en distintas ciudades y localidades de la diócesis por parte de grupos de jóvenes misioneros ha tenido una importancia clave en el conocimiento mutuo, en el amor por el sentido de la misión, y en la revitalización de comunidades católicas que hasta ahora habían sido visitadas más bien por otros grupos religiosos o incluso por sectas.
Conjugando la Pastoral Litúrgica, con la de Juventud, con la Pastoral misionera, la vocacional y la caritativa institucional, fueron planificadas las misiones juveniles en el mismo lugar, ciudad o partido donde iban a ser celebradas las Fiestas Patronales diocesanas (en torno al 8 de mayo), día en que se viene llevando a cabo una entera «Jornada Pastoral», compuesta principalmente por la dimensión catequística, juvenil y caritativa.
También en este sentido, ha de dársele una dimensión evangelizadora y de promoción integral a la Pastoral de la Salud (con su Delegación diocesana, y sus grupos de pastoral de la salud en las parroquias) la Pastoral Carcelaria, tan necesaria e importante en nuestra sociedad argentina actual, la Pastoral de las adicciones, la Pastoral de la Vida ascendente, la Pastoral de los migrantes e itinerantes (con una especial atención a aquellos grupos humanos de más difícil integración o que han sido particularmente afectados por sectas o grupos para-religiosos) y, no menor, una Pastoral ciudadana y cultural en vistas a un compromiso político (de los laicos) y del cuidado del medio ambiente. Esta última podrá ser ámbito privilegiado para la actividad del naciente grupo de Justicia y Paz en nuestra diócesis, con la asesoría de la Delegación de Pastoral social. Entre los distintos sectores pastorales, no debe de ningún modo descuidarse la zona geográfica de las islas, que comprende principalmente a los partidos de Escobar, Campana y Zárate.

8. Aplicación de la dimensión misionera de toda la Pastoral en las parroquias y en los decanatos
Como ha venido diciéndose, es necesario suscitar una pastoral misionera en nuestras parroquias, con la aspiración de vivir (parroquias, movimientos y asociaciones de fieles) en «estado de misión», lo cual significa, por un lado, que todas las actividades pastorales poseen una dimensión misional y misionera en sí (la cual ha de ser intensificada), y por otro lado, que las parroquias, e incluso los decanatos, han de realizar «gestos» misionales concretos, tales como son, por ejemplo, las misiones populares o las misiones juveniles.
Fomentar una espiritualidad de la comunión para la misión, puesto que esta última perdería toda fuerza si no se hace en comunión con el Obispo y con la Iglesia, así como potenciar el apostolado laical hacia dentro de la comunidad eclesial y las iniciativas de presencia pública de nuestros laicos.
Intensificar una Pastoral vocacional, convencida, alegre, comunional, tanto en lo concerniente a la vida sacerdotal y religiosa como al matrimonio y a la vida seglar. Esto último ha de considerarse teniendo en cuenta la urgencia de intensificar en especial la Pastoral vocacional sacerdotal (Cf. Pastores dabo vobis, de S.S. Juan Pablo II) y religiosa.